Bib Azahar 11

Versos como Mariposas

Cargado de razón el gran poeta dijo:
“Puedo escribir los versos más tristes esta noche”.

A veces yo quisiera poder escribir versos
mas se escapan como esquivas mariposas
que dejan mis anhelos incumplidos
alrededor del teclado o de la almohada
que acogen agitados mis latidos.

Otras veces, se posan en letras y palabras
y me guían a horizontes que consigo
tocarlos con mis dedos. Mas son tan pocas
que me llenan de dolor y de quejidos.

No distingo demasiado los contornos,
ni nítidas las palabras las percibo.
De las cosas que pasaron hace tiempo,
de mi juventud, lejano es lo que miro.

Pasaban ante mí, al alcance de mis manos,
que no tomé, prisionero de mí mismo.
Mas intento revivir, de aquellos años,
al que yo era, ignorante en el camino,

y mariposas busco en el recuerdo,
en aquellas mañanas soleadas
del pueblo que habité cuando era niño,
o en los juegos gozosos en la hierba,
en el campo de fútbol los domingos,

o en fuentes y rotondas de aquel parque
jugando a la pelota con amigos,

o en las tardes doradas del otoño
bajando en la parada de Mochingo,
o aquellos ojos negros de una niña
que apresaron con rejas mi destino.

Desde entonces, ¡cuánto tiempo que ha pasado!,
arrastrando soledades por mil sitios
hasta hoy que una musa me ha salvado
con mariposas danzando en sus vestidos.

Mas conmigo me sigo peleando
cuando intento rescatarme del olvido.
Y así, entre el hoy y mi ayer voy caminando
tras el rastro de estos versos fugitivos.

*

Caminos

Durante casi una vida,
en todo ese vasto tiempo,
dime ¿dónde andabas tú?
¿dónde yo?, que te contemplo.

Tú, ajena, navegando
por sendas del firmamento,
entre una y otra orilla
de ese océano inmenso.

Yo, perdido, naufragando
en el Ponto yermo y negro,
acosado por los dioses
de los mares y los vientos.

Y por fin, toda una vida,
junto al mar, en nuestro reino,
nos cruzamos los caminos
atrapados por los besos.

*

Aullido

Quiero arrancar un poema
de las entrañas del alma,
que sea como un aullido
anterior a las palabras,
y tenga todas las voces
de la condición humana.

Quiero aullar un poema
con las vísceras del alma.

*